Ya llega el tiempo de terrazas, siempre guardo con cariño aquellos años en los que viví en Malasaña. De ahí una visita a el café El Rincón, del que destaco su especialmente agradable pequeña terraza, en una situación estratégica. Las viejas mesas y sillas (cada una de su padre y de su madre), la magnífica lámpara de araña y las paredes pintadas en azul agua consiguen dar a este lugar un aire muy "La Habana".Recomendado el salmorejo entre sus platos sanos y sabrosos, de postre las tartas caseras.
El te helado a la hierbabuena o el vermut de grifo son los indiscutibles de la terraza.
El Rincón. C/ Espíritu Santo 26, Madrid.